Campinoti explica cómo fue la decisión de irse a Yamaha y las dudas que tenía por el estrecho vínculo con la marca italiana.
Pues sí, como muchos sospechaban tras la marcha de Jorge Martín de Ducati, el Pramac no seguirá con la marca italiana. Ayer viernes se confirmó de forma oficial que el equipo de Paolo Campinoti se unía a Yamaha, algo que no pilla muy de sorpresa, pero que puede perjudicar, aunque sea mínimamente a Ducati. Tras ese anuncio, Campinoti habla de ello en exclusiva en el medio italiano Sky Sport.
Las historias de amor siempre llegan a su fin y la de Pramac con Ducati quizás ha tenido un final algo agridulce… El Team Principal del equipo confiesa que por un lado está “muy contento” por el cambio, pero también muy triste “porque se acaba una historia profesional, y también de amor, con Ducati“. Una historia que sin duda es difícil de borrar, son muchos los recuerdos que se dejan atrás.
Sin duda, la elección por parte de Dall’Igna de Marc Márquez ha hecho replantearse la situación en Pramac que, tras esa decepción, no sentía que formara parte del proyecto Ducati: “sentimos que habían cambiado de prioridades“. “Se casaron con otro proyecto, se llevaron el ‘Cristiano Ronaldo’ y renunciaron al equipo. El proyecto que Ducati está haciendo ahora es diferente al que nosotros creíamos“, continúa, equiparando a Márquez con Ronaldo.
Los actos tienen sus consecuencias
Confiar en Marc Márquez en lugar de hacerlo en Jorge Martín para subir al equipo oficial es algo que Campinoti no llega a comprender, “la elección de no llevar a Martín es sin duda una elección que no compartimos“. Por supuesto esta aparente desvinculación en el proyecto por parte de Ducati ha tenido un resultado más bien negativo para la marca de Borgo Panigale: “Se llevarán a ‘Cristiano Ronaldo’, pero eso acarrea consecuencias“.
Las condiciones en el contrato de Yamaha son muy suculentas en términos de desarrollo con motos idénticas a las del equipo oficial además de la posibilidad de un equipo en Moto2, “lo que está haciendo Yamaha ha generado mucho trabajo en Italia“. El propietario de Pramac es consciente de que la marca japonesa no está atravesando sus mejores años, pero está seguro de que “saldrá adelante“. “El año que viene nuestras ambiciones no son desde luego ganar el campeonato del mundo, sino iniciar un proyecto que nos pueda llevar a soñar de nuevo con temporadas así“, asume.
La función de Pramac en Ducati siempre había sido la de puente para terminar de formar a los futuros campeones, como han hecho con Pecco Bagnaia. “Era un poco el ADN de nuestro equipo. Coger a jóvenes pilotos, hacerlos crecer y llevarlos a resultados importantes. Eso es lo que nos gustaría seguir haciendo…“, sentencia Campinoti.
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