Marc Márquez analiza su victoria en la Sprint de Qatar con sinceridad y precisión, destacando el valor de la prudencia, el aprendizaje tras Austin y su transformación como piloto.
Marc Márquez volvió a brillar bajo los focos del circuito de Lusail, firmando una victoria tan trabajada como estratégica en la carrera Sprint del Gran Premio de Qatar. El piloto de Cervera, que ya había sorprendido con una brillante pole position, cerró un sábado perfecto que lo sitúa como firme candidato a todo. Esto es lo que dijo a los medios de comunicación tras la carrera, y nuestro colaborador Manuel Pecino nos traslada sus palabras. Márquez compartió sus sensaciones tras un día redondo y ofreció una mirada realista, prudente y profundamente analítica sobre su rendimiento.
El ocho veces campeón del mundo no ocultó su satisfacción tras cruzar la meta en primera posición. “Estoy contento, muy contento, extra contento, pero controlando mis emociones porque sé que mañana es el día importante. Pero la verdad es que ha sido un sábado superando las expectativas que teníamos y el objetivo que teníamos. Evidentemente si lo superas no vas a cortar gas, sino que las cosas están saliendo.”
Entre el realismo y el optimismo
Fiel a su estilo, Márquez quiso dejar claro que sus declaraciones previas no fueron falsas expectativas, sino fruto de una mentalidad equilibrada. “Me importa un pepino que me llaméis Pinocho (dijo entre risas) porque todos los fines de semana intento ser realista. Cuando por ejemplo llegamos en Austin y dije que intentaríamos ganar, lo intentamos, cometimos un error. Aquí intento ser realista con todos vosotros, pero en mi mente optimista porque hasta que no sales, no sabes cómo te vas a encontrar. Pero si coges históricamente en este circuito, no os estoy mintiendo”
El de Gresini reconoció que Lusail no era una de las pistas en las que esperaba destacar. “Este sábado ha sido el más importante de la temporada. En un circuito donde tenía marcado perder los menos puntos posibles. De momento he conseguido la pole y la sprint race, pero con calma y prudencia porque mañana es la carrera larga.”
Reconocimiento a su hermano Álex y análisis estratégico
Marc tuvo palabras de elogio para su hermano Álex Márquez, quien también está destacando este año. “Álex está haciendo una temporada increíble. Es súper constante, controla los momentos, los límites, está gestionando las situaciones. Esto le hace estar donde está. Pecco y Álex tenían marcado este circuito para atacar. De momento me estoy defendiendo bien.”
El valor de la prudencia y el aprendizaje de los errores
La caída en Austin aún pesa, pero ha servido de aprendizaje. “Después del error de Austin era muy importante no cambiar nada. Lo estábamos haciendo todo bien. No hacía falta cambiar nada, ahora atacar más, ahora ser más precavido. Me caí en Austin por arriesgar poco. Y es ahí donde tenemos que mejorar esos puntos, esas extras de confianza y controlar todos los momentos.”
La confianza recuperada
Márquez aseguró que no se sentía tan fuerte desde su última temporada dominante. “¿Cuándo es la última vez que estabas tan confiado y tan seguro? 2019. ¿Estabas a ese nivel o incluso te sientes mejor? No, igual. Aquí he empezado trabajando mentalmente en cambiar un poquito anti-instinto, pilotar al revés de lo que me pide el instinto y de momento lo estoy logrando.”
Una pole arriesgada, una victoria merecida
Márquez reconoció que ir al límite fue la única manera de lograr la pole. A pesar del éxito, mantiene los pies en el suelo y la mirada puesta en el domingo. “¿La pole? Sí. Pero todo el mundo arriesga la pole. He ido al límite. El segundo ha ido al límite, el tercero ha ido al límite, el cuarto ha ido al límite. Pero sí, he arriesgado. Como he arriesgado en otras pistas. Un fin de semana son milésimas de segundo donde te cambia la tortilla, aun siendo el más rápido.”
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