Paolo Simoncelli revela los desafíos financieros y emocionales de la carrera de su hijo Marco en el mundo del motociclismo.
Paolo Simoncelli, padre del recordado piloto de MotoGP Marco Simoncelli, compartió recientemente una serie de reflexiones sinceras en PecinoGP sobre la carrera de su hijo y los desafíos que enfrentaron juntos en el mundo del motociclismo. Desde los humildes inicios de Marco en las minimotos hasta los momentos de incertidumbre en las categorías superiores, Paolo revela las dificultades financieras, las decisiones difíciles y el papel crucial que desempeñó como padre y mentor en la trayectoria deportiva de su hijo. Estas declaraciones ofrecen una visión íntima de las realidades detrás del éxito en un deporte tan exigente, mostrando cómo la determinación, el sacrificio y el apoyo familiar fueron fundamentales para que Marco alcanzara la élite del motociclismo mundial.
Paolo Simoncelli relató con crudeza los sacrificios y las dificultades económicas que enfrentaron en los primeros años de la carrera de su hijo Marco. «Llevé a Marco a las minimotos. Iba rápido, le gustaba y se divertía, yo estaba contento. Se dice que económicamente no es correcto, pero sabemos que las carreras son caras. Al principio me dediqué a mendigar. Iba a pedir limosna y me llevaba al niño conmigo cuando iba a las empresas. Ahora es el hijo el que tiene que hacer dinero para la familia. Es una locura. Porque yo vi a Stoner durmiendo en una caja de cartón en Jerez cuando llegó desde Australia, que vivían en una caravana. La caravana se averió en Jerez. Si no ganaba la carrera, no se podía ir. En ese tiempo daban 3.3 millones de liras, me parece. Le daban algo de dinero.»
«Nosotros hipotecamos la casa»
Paolo compartió cómo él y su esposa tomaron decisiones valientes y arriesgadas para apoyar el sueño de su hijo Marco. «Mi esposa y yo hipotecamos la casa. Es decir, mi esposa y yo siempre creímos que Marco se convertiría en alguien. Nunca tuvimos ninguna duda al respecto. Cuando tú crees en algo… Está claro que no estamos bien, pero no tenemos ningún remordimiento, porque hicimos lo necesario para que Marco fuera feliz. Tenemos esa certeza, así que estamos tranquilos.»
El italiano reveló un momento crucial en la carrera de su hijo, marcado por dificultades que casi los llevaron a abandonar. «Nuestro click fue un momento complicado. Fue cuando fuimos a 250 con el equipo de Bracci. Un gran jefe técnico para los demás, pero para nosotros fue un equipo malvado. Y ese fue un momento realmente difícil, porque estuvimos a punto de dejarlo.»
Simoncelli reflexionó sobre su papel como padre y mentor en la carrera de Marco, destacando la importancia de su presencia constante. «Encargarse de la parte deportiva del hijo y dejarlo ir… según yo no existe ese punto. No existe en el sentido de que también depende de los padres. Marco siempre dijo: Mi papá es el único que ha visto todas mis carreras desde cuándo…. Y yo, cuando llegamos a MotoGP, dije: ¿Me quedo fuera?. Y luego ya sabes cómo son los japoneses. Y en cambio él me dijo: Quiero que vengas conmigo a la parrilla y quiero que estés conmigo. Así que aceptamos. Entendí que tenía que observar, estar donde él estaba. Escuchaba y luego esperaba a que él me dijera: Entonces, papá, entonces yo podía hacer lo que pudiera, y él escuchaba, aunque a veces parecía que no. Pero al final escuchaba.»
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