Loris Baz ha hablado de su aventura en el King of the Baggers
Después de una carrera ya extremadamente ajetreada (Superstock, BSB, Resistencia, Superbike, MotoGP, Superbike de nuevo, MotoAmerica Superbike) con sólo 32 años, Loris Baz es este año uno de los tres pilotos de fábrica Indian en la categoría King of the Baggers. Es una extraña elección de máquinas para nosotros, pobres europeos, y le pedimos que nos lo explicara, entre las pruebas para Dunlop en Bugatti y el vuelo a Estados Unidos…
Loris, ya hemos visto lo que le dijiste a Sean Bice tras tu podio en Daytona, pero ¿podrías explicar por qué elegiste participar en el campeonato King of the Baggers? «Escucha, es una serie de cosas. Al final de la temporada pasada, cuando nos sentamos con el equipo Warhouse New York, sabíamos que iba a ser complicado para ellos fabricar dos motos en 2025 por razones presupuestarias, tras la pérdida de un patrocinador a principios del año pasado. Así que empezamos a hablar de ello, y al principio el equipo me habló de montar un equipo Baggers porque también son concesionarios de Indian, y tenían interés en hacerlo. Eso fue en septiembre, y no volvimos a hablar de ello porque estábamos haciendo todo lo posible para poner en marcha el proyecto Superbike y tratando de encontrar socios».
«Y luego, a finales de noviembre, cuando nos dimos cuenta de que iba a ser complicado, que las oportunidades de socios no se estaban desarrollando, hablamos de nuevo con Louis (DeNaples) de Warhouse y me dijo: ‘Escucha, más que hacer un equipo para nosotros, están interesados, están buscando un 3er piloto para hacer 3 pilotos en el equipo oficial de Indian’. Así que hablé con Gary (Gray) por teléfono, que es el jefe de Indian para la carrera, y eso fue todo. No tenía ni idea de qué esperar, ni de si quería hacerlo, y de hecho tuvieron una sesión de pruebas a principios de diciembre y volé. Le dije: ‘Me subiré al avión, iré y correré un día’, y de hecho corrí un día, Petersen corrió el segundo día. De hecho, fui allí sólo para ver cómo era, y me dije ‘si me divierto, ¿por qué no?'».
«Yo quería tener mi libertad para hacer lo que quisiera en otras carreras»
«Y de hecho, sí, me divertí, es divertido pilotar, el equipo trabaja muy bien, francamente la organización es digna de los mejores equipos en los que he estado, trabajan muy, muy bien. Así que eso, el ambiente y todo, me atraía, y ya está, me lo pasaba bien encima de la moto, así que me dije ‘¡Vamos!’ Después de eso hablamos, negociamos un poco sobre 2 o 3 cosas, yo quería tener mi libertad aparte, para hacer lo que quisiera en otras carreras, de resistencia, para el Mundial de Superbikes, sustituciones, etc., pero aparte, en vez de quedarme en casa, pues por lo menos tenía un proyecto en algo que merecía la pena, y eso molaba. En cualquier caso, si no hubiera hecho eso, me habría quedado en casa entrenando, como ya he hecho varias veces, y esperando a que hubiera un manillar disponible o se presentara una oportunidad».
«Así que, de hecho, estoy en la misma situación, con la diferencia de que, además, tengo en marcha un proyecto ambicioso. Y luego hubo muchas cosas que se interpusieron en el camino, el hecho de que fui embajador de Polaris durante años, que Polaris compró Indian hace 15, 20 años, que conozco a todo el mundo en el grupo Polaris Indian Europe: hubo muchas cosas que hicieron que fuera genial que esto estuviera sucediendo y que fuéramos a tener una buena temporada».
«En cuanto me subo a una moto, disfruto»
Eso nos lleva directamente a la segunda pregunta. Eres un piloto de muy alto nivel, MotoGP, Mundial de Superbikes, etc, que ha corrido con las mejores motos del mundo, y dices que estás disfrutando sobre la moto. Visto desde Europa, nos preguntamos cómo es posible, después de todo lo que has pasado. Cuéntanoslo…
«En cuanto me subo a una moto, disfruto, y de hecho creo que es lo mismo para todos los pilotos. Por supuesto, las mejores motos que he pilotado en mi vida y en las que he tenido las mejores sensaciones siempre serán las de MotoGP. Pero de hecho, al mismo tiempo, cada vez que me he subido a una moto, ya sea una de cross, mi compañero abriendo su garaje y yo subiéndome a su moto para hacer el tonto en un campo, siempre me he divertido».
«Así que es lo mismo aquí: he estado en una, y las Baggers son motos que no tienen control de tracción, pero son motos que hacen más de 200 caballos ahora, que hacen más de 300 por hora, que van a 4 segundos de las Superbikes, y de hecho derrapan mucho. Así que eso es lo que es tan gracioso, no hay control de tracción, por lo que se desliza mucho. Es bastante divertido. Es un motor con mucho par, por lo que se desliza mucho y eso es lo que es tan divertido. Después, con la normativa, la moto no puede bajar de 260 kilos. Así que tiene sus inconvenientes y tienes que lidiar con eso, tienes que adaptarte, pero no fui allí con la mentalidad de decir ‘voy a tener la sensación que tengo en una Superbike'».
«Fui allí diciéndome a mí mismo ‘allá vamos, vamos a ver cómo es’. Y antes de subirme a la moto, le dije a Troy (Herfoss, campeón 2024) ‘¿cómo se maneja esto?’ Y me dijo ‘ya verás. Yo me hice la misma pregunta y al final es solo una moto’. Hice dos vueltas tratando un poco de entender qué pasaba, y luego, pues eso, buscas el rendimiento, intentas frenar cada vez más tarde, acelerar cada vez más pronto, también tratar de entender qué necesita la moto, si hay que pilotarla tratando de mantener la velocidad o levantándola más. Entonces, entras de inmediato en lo que siempre has hecho, en el rendimiento, y tratas de ser lo más rápido posible con lo que tienes entre las piernas».
Puedes leer la entrevista original en francés en la web de nuestros socios PaddockGP.
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